angulaberria.info .- Son ya muchos meses los que la red de acogida lleva acompañando a personas migrantes todas las noches en busca de un lugar donde pasar la noche. A dos reuniones por mes con los y las responsables municipales que por respuesta "por tener no tenemos ni el NO" como denuncia la red. Ni estancia en los pórticos del Ayuntamiento ni señalización de Martindozenea son las peticiones que reciben un "no sordo". Además de las mentiras como que "ninguna persona queda desatendida".
Desde hace ya muchos meses llevan acompañando a personas migrantes cada noche en la búsqueda de un lugar para dormir. Sin embargo, "con otras muchas no hemos podido hacerlo", explican, "algunas vienen ya con la idea fija de seguir su camino hacia el norte y se dejan llevar por los contactos que se les ofrecen seguir adelante por 100, 200 euros o lo que sea". Es la necesidad que "hace que personas en situación precaria de nuestro entorno aprovechen el momento para hacer negocio". Mientras otras personas no se fían de las voluntarias de la red. ¿Por qué no iban a hacerlo?, se preguntan desde IHS, "llevan meses de camino, siendo engañadas, robadas y maltratadas". Les han comentado como en el Sahara les ofrecían lo mismo, les montaban en furgoneta para después ser conducidas a locales donde se les ataba, maltrataba y donde se llamaba a sus familiares para pedirles dinero. Todas las noches las voluntarias de IHS ven "en sus caras ese miedo y desconfianza". Si bien confiesan que aun con todo en muchas ocasiones han conseguido "romper esa barrera de desconfianza" y acompañarles a lugares seguros donde poder pasar la noche bajo techo.
La importancia de señalizar Martindozenea
La ronda nocturna de las "gautxoris" comienza todas las noches en la estación de trenes y autobuses. Si, como ya se ha comentado, convencen alguna persona migrante y suben a la furgoneta la primera parada es Martindozenea. Pero como denuncian "ni una sola señal de Cruz Roja en el camino ni cuando paramos el vehículo en un edificio sin distintivos" todo ello en "una zona oscura saliendo de la ciudad" y además "nos recibe un «señor» uniformado". Denuncian así mismo que ninguna autoridad lo hace y no hay manera que entiendan que "nadie ha recorrido las calles de Irun y Hendaia" como ellas "buscando a hombres, mujeres, niños y niñas para ofrecerles cobijo en muchas noches de frío, lluvia y viento". Han sido testigos de como algunas han terminado pasando la noche en la misma calle.
Sordera institucional
No se han quedado ahí y han pedido ayuda y colaboración a las responsables políticas y técnicas del Ayuntamiento de Irun para que esto no suceda. Y cada quince días que se reúnen con ellos y ellas la misma respuesta: "no les consta y que toman nota". Y así "tomando notas llevan muchas reuniones sin dar ni siquiera contestación a nuestras demandas" denuncian, y dicen más, "por no tener no tenemos ni el «No»". Así no tienen ni el sí, ni el no para señalizar el recurso que gestiona Cruz Roja en Martindozenea. Por no hablar de la identificación del edificio en si, porque como denuncian la respuesta es que "no es necesario porque les consta que las personas migrantes llegan". Pero si llegan es porque "nosotras les llevamos, por eso llegan" como aseveran con rotundidad. Una mentira más entre las muchas.
Mentiras y actitudes miserables e hipócritas
En ocasiones el no si forma parte de las representantes municipales como en el caso de la petición de permitir la estancia en los pórticos del propio Ayuntamiento aquellos días de frío, lluvia y viento. Esa es "la idea de nuestro consistorio de una acogida digna" denuncian y continúan "simplemente miserable e hipócrita (...) a nuestro alcalde le molestan las personas migrantes y le molesta la red. Pero, claro, como todavía tiene que parecer de izquierdas qué mejor que hacer el gran teatro de la ayuda humanitaria. Vamos a poner en marcha la maquinaria mediática para que esto no parezca lo que no es."
No se quedan en el consistorio y denuncian que por otro lado, tienen que escuchar "a una representante de Cruz Roja diciendo que ninguna persona se ha quedado en la calle desatendida". Otra mentira más según IHS que denuncia que por ejemplo, el pasado 1 de febrero "Cruz Roja dejó a tres chicos en la calle".
Según la red esta es "una crisis de valores y desgraciadamente esto irá en aumento en los próximos meses".
Cabe preguntarse si después de estos meses, ya ocho, y como comentan, desgraciadamente irá en aumento las instituciones están preparadas para una nueva primavera y verano. Solo cabe responder, no se sabe, no se contesta.